La Navidad es la época más mágica del año: el espíritu navideño se siente en el aire, nos apetece pasar tiempo con los nuestros y es una época excelente para disfrutar de una escapada con amigos, en pareja o con la familia al completo.

En definitiva, son fechas para recargar las pilas, para descansar junto a quien más queremos y para coger energía antes de volver a la rutina. También para hacer detalles a la familia, a los amigos y para disfrutar de comida caliente, risas, películas y libros de temática navideña.

Lo cierto es que la Navidad es increíble, sea donde sea, pero hay destinos realmente especiales que se esfuerzan año tras año para decorar sus calles de la mejor manera y recibir a los viajeros.

Unas Navidades en un castillo medieval

Este año, regálate la escapada que tanto mereces y hazlo de una forma todavía más especial: visita Curiel de Duero, donde se encuentra Hotel Castillo de Curiel, un alojamiento en un castillo medieval del siglo XI totalmente reformado en su interior para ofrecer los mejores servicios y comodidades a sus huéspedes.

Y es que, ¿te imaginas lo que es pasar la Navidad en un castillo en una roca sobre un cerro a 927 metros de altura y con unas vistas de ensueño?

Un hotel que, además, cuenta con 23 habitaciones y suites de diferentes tipologías, además de salones para celebrar eventos, restaurante con la gastronomía local de primerísima calidad y comedores para banquetes, así como también piscina y solarium en las almenas.

Como plus, para los amantes de la enología, el hotel cuenta con una bodega en la que se cosechan sus vinos, entre los que destaca el tinto Viejo Coso, galardonado en varias ocasiones.

Navidad cerca de Valladolid

Para una experiencia más completa, es una idea genial desplazarse hasta Valladolid y disfrutar de algunas de las atracciones navideñas de la capital de la provincia.

Te recomendamos el impresionante Mercado Navideño que se celebra año tras año en la Plaza Mayor, donde se respira un ambiente festivo y familiar con cientos de paraditas para comprar los regalos de Navidad y objetos de decoración, además de productos gastronómicos típicos de la zona. Asimismo, otra visita obligada es el Belén Monumental en la Sala de Exposiciones de las Francesas, que se acompaña de un ciclo de música coral.

Estas Navidades, no lo pienses más: regálate una escapada mágica y disfruta de unos días inolvidables alojándote en un castillo medieval.

Reserva tu estancia, ¡te esperamos en el Hotel Castillo de Curiel!.