Disfrutar de un buen vino en algunos de los paisajes más bonitos de la Ribera del Duero es probablemente uno de los planes más románticos que hay para amantes del turismo enológico.

Y es que no hay nada más especial que pasear entre viñedos y terminando el día en una visita a las mejores bodegas disfrutando de una cata de vinos.

Para sorprender a la persona que más quieres, una opción ideal es regalar una estancia en el Hotel Castillo de Curiel, un hotel en Curiel de Duero que se encuentra en un castillo documentado desde el siglo XI, totalmente reformado para convertir las ruinas históricas de su interior en un hotel con encanto con todos los servicios para una experiencia agradable.

Asimismo, su localización sobre un cerro a 927 metros de altura le proporcionan unas vistas impresionantes a sus alrededores, y es que se encuentra cercano a ciudades de atractivo turístico como Peñafiel, Valladolid o Aranda de Duero.

Los mejores planes románticos por Curiel de Duero

¿Quieres sorprender con una experiencia única de turismo romántico entre viñedos? En tu estancia no puedes dejar de visitar alguna de las bodegas más conocidas de la zona, entre las que destacan la bodega Arcos de Curiel, las Bodegas Comenge o las Bodegas Castillo de Peñafiel, pertenecientes al hotel Castillo de Curiel y en las que se elabora su tinto “Viejo Coso”, galardonado con la Medalla de Oro en el prestigioso Challenge International du Vin de Burdeos.

Precisamente en el hotel también se puede visitar el dormitorio de barricas, situado en una iglesia del Siglo XII entre cuyos muros maduran los caldos en condiciones óptimas que distinguen el producto entre los más famosos de la zona del Duero.

Habitaciones únicas y auténticas

El Hotel Castillo de Curiel cuenta con unas instalaciones auténticas a la vez que renovadas que nos transportan a siglos atrás gozando de todas las comodidades de su reforma y con todo tipo de detalles para asegurar el máximo confort de cada persona que lo visita.

En cuanto a sus habitaciones, prácticamente todas ellas exteriores, han sido reconstruidas pensando en un lujoso relax de naturaleza, silencio, descanso y un exquisito trato que te harán vivir una estancia inolvidable en uno de los castillos medievales más relevantes de la historia de España. Sus elementos, además, te harán sentir que viajas en el tiempo mientras te hospedas en un alojamiento totalmente tranquilo y especial.

Se trata de la opción ideal para disfrutar del final del verano, puesto que cuenta con una piscina exterior para acabar de disfrutar de la experiencia perfecta, siendo perfecta para visitar con niños y niñas viajando la familia al completo, así como con un restaurante con platos tradicionales de la cocina castellana.

Sorprende a la persona más especial de tu vida regalándole una experiencia de turismo romántico entre viñedos, ¡estaremos encantados de hospedaros!